jueves, 12 de septiembre de 2013

Un jardín entre la niebla II

Robarle unas horas al día, intentar llevar de la mano a mamina hasta el jardín. Destapar un dulce recuerdo aunque no sea nítido, aunque los nombres bailen y no se acerque demasiado a la realidad.
En su realidad laten con fuerza momentos que emergen, pedacitos de varios recuerdos, algunos nombres intentando encajarlos con sus caras.

Esta tarde aún no a llegado, es día de "cole" como ella llama a estar unas horas en una residencia que la ayuda a practicar la memoria, ejercitar su mobilidad y de paso le deja tiempo a sus hijas para poder ir a algún recado o descansar, porque un día completo cuidando de una persona con alzheimer es agotador, tanto física como mentalmente.

A las 16:40 puntual como un reloj, se oye la furgoneta que la deja en la puerta de casa. Mamá y yo bajamos a recogerla. Cada una la coge de un brazo mientras nos despedimos del conductor y veo a mamina frunciendo el ceño y dando codazos a mi madre, pretende que agache la cabeza para hablarle bajito mientras mi madre sigue hablando con el conductor.
Le pregunto:

- ¿Qué quieres?

Me contesta, muy enfadada:

-¡Que me estoy meando!

jajaja parecia decir: "habré perdido mis recuerdos pero todavía tengo dignidad" solo pretendía que mi madre dejara de hablar ante su inminente necesidad y por supuesto que no la escuchara nadie más.

Una vez solventadas sus necesidades es hora de darle la bienvenida como se merece, la abrazo y la beso y pregunta:

-¿Quién eres?

Le digo que soy Mº del mar (a si me llamaba ella, sobre todo cuando quería regañarme) tu nieta mayor. Sorprendentemente me responde:

-¡Ay hija, que no te había conocido! estás más gordita.

jajaja ¡Me ha recordado! sujeta mi cara entre sus manos y dice:

-Eres muy guapa pero tienes que adelgazar un poquito.

¡Tengo abuela! ¡No hace falta que yo os diga lo guapa que soy! ;-D

Una vez sentadas mi madre le pregunta que si ha merendado a lo que ella responde que si.
Cuando nos quedamos solas le pregunto que es lo que ha merendado y ella responde en bajito:

-¡No he merendado pero calla que "esa" luego me atiborra y no quiero comer!

¡Imaginad mi carcajada! y ella rie conmingo. ¡Ya estamos en el jardín!

Pasa la tarde preguntando por los niños que hay en casa, les hago venir de uno en uno para que la saluden y para mi sorpresa hoy reconoce a casi todos sus bisnietos.
El tiempo apremia y tengo que marcharme, al despedirse me dice:

-Ven más a menudo que te veo muy poco.

Salgo emocionada, llorando por dentro. Hoy por unos instantes recuperé a mamina, mi abuela, bailé entre sus recuerdos con ella.

¡Soy feliz!




Este video es de Nat King Cole, en mis recuerdos cuando vivía junto a mamina, mi abuelo ponía mucho sus canciones porque sabía que a ella le gustaba. La elegí por eso y su letra me pareció muy acertada.


Mar, rosa azul.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Encajando piezas

La vida se compone de fragmentos de tiempo que debemos encajar como si de un puzzle se tratara. Empiezas con los bordes, esos limites de tiempo por el que van a transcurrir esos fragmentos que debemos encajar. A continuación debemos formar el puzzle de nuestra vida acumulando las piezas por colores:  los brillantes, los opacos y los más oscuros...
Hoy terminó el puzzle de mi verano, un inmenso cielo negro con alguna estrella brillando a lo largo de la oscura inmensidad. Oscuro pero bello al fin y al cabo.
Como una bella noche de verano, estrellada y con poca o ninguna claridad.
Pasó, se terminó y es hora de empezar  un nuevo puzzle. Tengo la posibilidad de elegir que colores llevará el nuevo pero la vida se empeña en dar pocas opciones, ya empieza siendo de fondo oscuro. Solo deseo que si solo hay una luz brillando en el cielo, sea la luna alumbrando a mi mamina mientras disfruta de un pequeño jardín entre la niebla de nuevo.
Mamina tiene una infección, la ingresaron hoy, en uno o varios días la tendremos de nuevo en casa.